Viaje a la Luna

Viaje a la Luna

Una memoria a mis antepasados, a mis vivencias...unos versos de futuro.

QUIEN NO SE OCUPA DE NACER SE OCUPA DE MORIR

jueves, 6 de enero de 2011

Una palabra no dice nada
y al mismo tiempo lo esconde todo…
(Carlos Varela, “Una palabra”)

Muchas veces pasamos por alto cosas simple que nos pasan en la vida y es allí donde esta la magia de nuestra existencia.
El pasado 15 de Octubre de 2010 cumplí 10 años que no vivo en Cuba, todo un tema teniendo en cuenta que allí tengo a mi hija viviendo, primos entrañables y una tía, mi tía Piro, deje a mi amigo del alma Orestes que hoy me vigila desde el cielo, deje amigos del barrio, compañeros del trabajo y amigos del trabajo también, deje a mis vecinos, esos que están con uno toda la vida, Ana Julia, Margarita, Adoración, Molina, la vieja Julia, Olga la de Molina…pero, al mismo tiempo que los deje los llevo conmigo a cuesta, como una mochila llena de regalos que los disfruto cuando la melancolía me hace broma y me arropa haciéndome el amor…
Recibí el 25 de Noviembre de 2010, hace nada, teniendo en cuenta que celebramos hace poco la venida del 2011 tres regalos de un amigo (del cual no menciono su nombre pues no le pedí permiso para ello), regalos simples,  entrañables, la carta que precedía estos regalos fue poética en si mismo con la plenitud del camino recorrido. Un paquetito de café, unos tabacos de la bodega y un libro “Asedio a Lezama Lima y otras entrevistas” fueron los regalos, reproduzco la carta porque sentado en el balcón de mi casa nueva, acá en el Sur del Planeta, muy lejos de mi Lawton querido, me dejo un lagrimon que como le escribí después agradeciendo su generosidad para conmigo, solo vio el viento que pasaba por allí.

Querido Maño:
Aquí te envío estos dos símbolos de la escasez de por acá. Usted prepara una pócima con el polvo oscuro del paquetito, luego le da candela a esas hojas de tabaco de barrio, cierra los ojos y automáticamente entre trago y humo, se vera en el portal de una bodega de Lawton jugando domino con los negros del barrio.
Abrazos…

Hice tal cual me recomendó mi amigo, y allí estuvo la magia, jugué descalzo como tantas veces lo hice en el portal de la bodega de Bellavista y C, a unos cuantos metros de la casa de mi tía Olguita donde tantas veces me regalo un café con leche con una pizca de sal que era un manjar de los dioses y que mas nadie ni por asomo lo pudo preparar como ella, allí estaba en María Regla 64 a una cuadra de la bodega, en el portal de casa de mi tía Piro riéndome de los cuentos de mi primo Pepito el Gitano, o viendo fumar un buen tabaco a mi primo Rogelito…nada, volví a nacer y eso se lo debo a unas palabras dichas con el corazón de quien te quiere bien.
Hace 10 años escribí los siguientes versos presagiando mi futuro….

Quiero escribir un tango a mi barrio
como tanto otros que he escuchado
que sea de noche
bar y prostituta
que sepa a Gardel
y  a un Fito explotado

Quiero que recoja lo que siente mi gente
de mi barrio ya marginado
vivo dicen en la Habana
y yo diría mas bien en su suciedades

Mi gente solo se reúne para tomar
y hablar de la noche de ayer con un extranjero
ya no existe amor de novela
sino de esta puta calle
que es mi condena

Escucho algo que no se publica
que la televisión es mierda
y hablamos mucha política

Yo señorito privilegiado
que estudie cuando estaba de moda
tengo una mama que esta feliz por ello
pero la madre de Longuito
enloquece por su tragedia
su hijo que dejo el trabajo
se dedica a vender su cuerpo
al contado

Ya estamos saliendo
nos vamos recuperando
y la era que pare una nueva era
aquí se piensa en la ida
donde se imaginan su salida

Lloro hoy de tristeza
por que tire piedra
cuando chico
me reía de no tener un peso
y hoy se matan a piedra
pensando solo en ello

Tengo tantas cosas
me decía mi amigo Nicolás
versos sencillos
que hoy están mas que prohibido
¿ Tengo vamos a ver ?
lo que tenia que tener

Mas mi barrio
grosero y de tango
es así de comunicativo
¿qué te pasa mi hijo?
¿Lisso
          mi vecina te duele algo?

Quiero a mi gente como son
por que aquí en este barrio
crecí yo