Viaje a la Luna

Viaje a la Luna

Una memoria a mis antepasados, a mis vivencias...unos versos de futuro.

QUIEN NO SE OCUPA DE NACER SE OCUPA DE MORIR

lunes, 9 de noviembre de 2020

¿Y AHORA COMO ES?

Tenemos derecho a reírnos de las torpezas del Imperio, de hecho ellos mismo lo hacen, pero dejar solo en la risa lo que ha ocurrido es un signo más de esclavismo mediático, es decir si lo que ha ocurrido en USA con sus elecciones ocurriría en cualquiera de nuestros países “tercermundistas”, la prensa hegemónica estaría no solo con los pelos de punta, sino incitando a la rebelión interna, en cambio, para bajarle el tono al papelón estadounidense pero sobre todo para “dejársela pasar” acuden, a deteriorar a la figura individual que ha asumido tal postura, en este caso Trump, como un niño malcriado que no le gusta perder ni a las bolitas.

De hecho si vemos el video que circulo por las redes y los medios que hiciera el New York Times sobre el “loser” de Trump, es más una caricatura que un hecho de denuncia social ante la situación que se está viviendo, está claro que no quieren jugar con fuego, porque quiéranlo o no, ese payaso, hazmerreír del Mundo entero fue votado por más de 70 millones de ciudadanos estadounidense, que de provocarlos podrían salir a las calles a enfrentarse a los otros 75 millones que lo detesta directamente.

No obstante, mucha gente no come vidrio y sabe que el tratamientos de los medios al tema de las elecciones en USA ha sido flojo, no ha sido tratado con la misma rudeza y justeza con que se tratan esos mismos temas en otras partes del Mundo, de ahí esas frases que circularon entre la gente de a pie, en donde se decía, “Para Estados Unidos es más fácil poner presidentes en nuestro países, que en el propio”, o aquella otra “Que pasaría si un grupo de países hacemos una declaración y consideramos a Trump como ganador, al final la elección está impugnada judicialmente, solicitamos que Putin lo reciba en el Kremlin y le ponga el mote de Presidente Encargado de USA, se abren embajadas paralelas USA 1 y USA 2. Los activos de USA, tipo oro depositados en bancos extranjeros son confiscados y se le prohíbe que el nuevo REGIMEN en USA encabezado por BIDEN y sus funcionarios usurpadores puedan hacer uso de ellos. Decimos que como no hay una Comisión Nacional Electoral de la Unión, no puede ser aceptado el conteo de los votos electorales, por algo tan ambiguo y parcial como los medios de comunicación”. Esto último a buen entendedor con pocas palabras, bloquean tanto a Venezuela y le han hecho la vida imposible a la gente de allí, con los Guiadós  y otras yerbas, que sería bueno que miraran el reflejo que hoy produce Trump y que si las masas que lo votaron se enardecen, las manifestaciones en Caracas a principio del 2019 que ellos produjeron, serian de niños de pecho a lo que podríamos ver en USA.

Estados Unidos de América se ha dedicado a “custodiar” militarmente la idea de la Democracia en el Planeta Tierra pero bien podríamos señalarle “algunas cosillas” para que arreglen su sistema, que por ahora ha demostrado no solo ser arcaico y retrogrado sino poco democrático, mirándolo con un solo ojo:

1.- Deben cambiar urgente que el derecho a votar es de solo aquellos que se inscriben y son ciudadanos americanos. El Voto, querida USA, es un derecho de todos los que tienen residencia permanente en un país a partir de la edad que en cada sociedad se considera al ser humano adulto y salvo que estés implicado judicialmente con algún impedimento, en la cárcel, o insania, ese derecho no se lo puedes quitar. Además que tengas una colonia como Puerto Rico, eso no quiere decir que el ciudadano americano allí residente o los mismos boricuas no puedan votar por TU presidente.

2.- Una elección democrática y popular es aquella donde el pueblo decide sus representantes por mayoría sin ningún intermediario, así que, a dejar mi querida USA esos miedos en que el pueblo se puede equivocar, si lo hace como ha sucedido en muchas ocasiones, es él el más perjudicado, y aprenderá a los golpes.

3.- En una Unión de Estados debe existir una autoridad NACIONAL independiente de los poderes legislativos y ejecutivos, pero más cercano al poder judicial, que organice y fiscalice el proceso eleccionario de la nación, de manera tal que sea este órgano el que procure mediante su accionar disminuir a cero los posibles fraudes electorales y encargarse finalmente de testificar con los votos populares quien encabezará los destinos de la nación por los próximos años que se determine el mandato. Por favor querida USA, que es eso de 538 electores que nunca se reunieron en su vida, y que dictaminan quien es el jefe de Estado en tu nación, ah!!!, y que mientras eso no ocurre, sean los medios ambiguos y parciales los que le informen al pueblo quien es su Presidente Electo.

Por favor USA, a ver si te pones las pilas, y hace unas elecciones como la gente, porque querida, estas como esa canción de Buena Fe,

Tengo un catalejo
Con él la Luna se ve
Marte se ve
Hasta Plutón se ve
Pero el meñique del pie no se me ve

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Llegó el momento de que Estados Unidos aprenda de democracia con humildad
(Por Pedro Brieger en eldestapeweb.com)

En la mayoría de los países democráticos, pocas horas después de que cierran las urnas, se conoce quién gana una elección presidencial. Esto no ha sido así siempre en Estados Unidos, porque el país más poderoso del planeta -al que le gusta dictar cátedra sobre democracia- tiene un sistema electoral anacrónico, extremadamente complicado, confuso y descentralizado. Es más, al no existir un poder electoral nacional e independiente como lo tienen la mayoría de los países democráticos, son los medios de comunicación los que informan del escrutinio, que sirve de guía incluso para los partidos políticos.

Por otra parte, al votarse representantes a un Colegio Electoral -que es el que elige al presidente- el llamado voto popular pasa a un segundo plano y no siempre vence quien obtiene más votos en todo el país, como lo pudieron comprobar Al Gore en 2000 y Hillary Clinton en 2016. Aunque parezca elemental, vale la pena recordar que en la mayoría de los países con sistema presidencial quien obtiene la mayor cantidad de votos gana la presidencia.

El estadounidense es un sistema electoral verdaderamente caótico, ya que cada estado tiene sus propias leyes electorales, sus particularidades, sus reglas, y donde el voto por correo o la fecha límite para inscribirse varían de estado en estado. Además, la resolución de discrepancias por resultados inciertos puede llevar a enfrentamientos entre una legislatura estadal y el gobernador, o que termine definiendo la Corte Suprema de Justicia.

El presidente Donald Trump denunció públicamente fraude de la oposición (sin ofrecer pruebas), mientras Joe Biden pide que se cuente hasta el último voto, lo que -obviamente- es muy normal en sociedades democráticas. Dos días después de las elecciones, y cuando todavía no había resultados finales, Trump tuiteaba “paren de contar” en una de las declaraciones más insólitas que se puedan escuchar durante un proceso electoral, como si hiciera falta aclararle que en una elección democrática se cuentan todos los votos.

¿Cómo calificar un sistema electoral en el que el presidente en ejercicio plantea que el partido opositor está pergeñando un monumental fraude sin ofrecer evidencia y donde se debate si hay que contar todos los votos? Muy sencillo: es un desastre. En vez de que EE.UU. insista en “enseñarle” al resto del mundo lo que es la democracia, tal vez ha llegado el momento de aprender, con humildad. Nunca es tarde.