Viaje a la Luna

Viaje a la Luna

LA LUNA DE NOKA

Una memoria a mis antepasados, a mis vivencias...unos versos de futuro.

QUIEN NO SE OCUPA DE NACER SE OCUPA DE MORIR

miércoles, 15 de octubre de 2025

Y EL FANTASMA TUYO, SOBRE TODO

Aterrice en Ezeiza un día como hoy, pero de hace 25 años atrás, llovía en Buenos Aires, real, real, venia por un tiempo, me había autoconvencido de ello para dar ese transcendental paso, venía a acompañar a mi esposa de entonces, Elisa, en el cuidado de su padre, que estaba mal, después de un tiempo volvería a Cuba. Llevo 25 años en este inusitado país, que he asumido como propio, un poco lo que le paso a mis antepasados gitanos en Cuba. Soy un gitano-cubano-argentino con pasaporte incluido.

La vejes viene llegando, a marcha continua, uno la esquiva como puede, pero te agolpa, estamos más cerca del arpa que de la guitarra y de ahí vienen los supuestos recuentos, tu pasado y su interacción con una sociedad que te vio nacer, dicen que la soledad es mala consejera, más que eso, la soledad evoca fantasmas que te persiguen sin cesar.

Mi Cuba no está pasando por un buen momento, mirándolo con un solo ojo y tal vez la palabra momento no está bien usada, la situación lleva tiempo, y hay una parte de la población, sobre todo de mi generación, que se siente frustrada. Viendo todo desde lejos, si no aparecen inversiones chinas o rusas (porque de los del norte, es pedirle peras al olmo) en este contexto, será todo más difícil, si encima el turismo no repunta, con los datos económicos que se conocen de deuda externa y otras yerbas, se seguirá sobreviviendo, sigo pensando que la tan cacareada prosperidad de Cuba no será posible si persiste, el genocida bloqueo, amén de la ineficiencia propia que se arrastra hace décadas.

Alguna vez escribí en un post que titule “¿LA GATA FLORA?, cuando se pregonaba con fervor un supuesto “reinicio” de la Revolución, por allá por 2016, con la visita de Obama, algo que vuelvo a dejar acá, en aquella ocasión, había euforia por un acercamiento y la supuesta “rosa blanca” que regalaba el primer presidente negro de USA:

(“…Reconozco que el Sr. Barack ha dado por primera vez un paso importante en las relaciones con Cuba, y digo él ha dado, porque es algo que siempre desde nuestra patria y acompañada por casi 200 naciones del Mundo se les dijo que hicieran y nunca oyeron, así que este Presidente (que no es ni presente ni futuro, porque le queda menos de un año y por sus innumerables bombas en el medio oriente) haya hecho lo que hizo, es muy plausible. Ahora bien, ¿Que me hubiera gustado escuchar del Sr. Barack y el poderío que representa?:

"Amigos de Cuba, una historia común nos entrelaza, en el pasado, antes de la llegada de los barbudos, esta Isla era nuestra, frustramos con nuestra intervención primero y con nuestro tutelaje después que los cubanos decidieran su destino, no dejamos que ese valiente Calixto García entrara a Santiago de Cuba, le impusimos una Enmienda Platt que nos dio potestades de intervenir en esta tierra cada vez que quisimos, nos quedamos con una parte del territorio de esta isla, le dimos el visto bueno a Gobiernos escandalosamente corruptos, que dilapidaron la poca riqueza que los trabajadores cubanos producían, sus pocas riquezas naturales, como el Niquel, fueron nuestras, al creernos dueños de " la tierra más bella que ojos humanos hayan visto" no pudimos soportar que una Revolución hiciera la Reforma Agraria, que alfabetizará a esa gran población cubana, que la salud fuera gratuita y para todos, que por primera vez en la historia de esta Isla un Gobierno le diera las posibilidades gratuitas para que hijos de obreros y campesinos fueran a la Universidades, los invadimos, les enviamos enfermedades para afectar a los trabajadores, para que no pudieran alimentarse de ese cerdo que ayer probé en la velada del Palacio de la Revolución, le incendiamos un Circulo Infantil, le volamos un avión con 73 pasajeros en pleno vuelo, le pusimos bombas en los Hoteles, les perseguimos todas sus transacciones económicas en el planeta tierra, le hemos hecho gastar cuantiosas sumas de dinero extra para que puedan acceder a los medicamentos contra enfermedades difíciles como el cáncer, hemos sido muy crueles e injustos con el pueblo cubano y es por ello que vengo a ofrecer hoy una rosa blanca a ustedes, vengo a dejarlos en paz, vengo  desinteresadamente a ayudarlos, no haremos nada que este pueblo y el gobierno que decidió libremente tener, no quieran, no seremos más un obstáculo en su camino, el "embargo" se eliminará, les devolveremos más temprano que tarde su Guantánamo y seremos grandes vecinos que se ayudaran mutuamente, renunciamos inequívocamente al concepto de que esta isla nos pertenece, ustedes y solo ustedes sabrán que es lo que más le conviene"

Así mismo en ese escrito, decía yo, …No es que sea como la gata flora, no tengo dudas, quiero un mejor país, quiero que cualquier cubano se pueda expresar libremente sin consecuencias laborales o de otra índole, quiero libertad para emprender y desatar cualquier iniciativa individual, quiero que los pocos recursos naturales que tiene el país le pertenezcan al estado y por ello a todos los cubanos, quiero que la industria nacional fundamental de sostén para el país sea socialista, gerenciada sin burócratas y con métodos administrativos modernos y eficaces, quiero una ciencia estatal prospera y vibrante al servicio de toda la sociedad, quiero salarios para los laburantes que les permita vivir decorosamente "sin inventar", quiero que los representantes del pueblo en la Asamblea Nacional no sean "un nite de poetas por un premio literario" y que sean profesionales a tiempo completo que recorran cada pedazo de la tierra que los puso en ese recinto y escuchen, y propongan leyes nuevas que den más derechos a los cubanos, quiero ser yo con mi voto, entre varios candidatos sin partidos, salido de propuestas en los barrio, elegir y votar al Presidente y Vice Presidente del Consejo de Estado, quiero salud y educación gratuita para todos los cubanos, que se cuide a nuestros abuelos con una pensión y una salud que les permita vivir decorosamente sin miserias, quiero casa para mi gente, quiero carreteras buenas y muchas, quiero que todos puedan descansar una vez al año con su familia como es debido, y otras tantas cosas que sería largo, pero todo esto sin que El IMPERIO (que existe y no es una holografía inventada) tenga una segunda intensión, que nos dejen tranquilo de verdad, que levanten el bloqueo, que nos den ese territorio de Guantánamo que nos pertenece desde siempre, que no intervengan bajo ningún concepto en la política nacional, que nos dejen decidir entre cubanos lo mejor para nuestra patria y que si desinteresadamente Estados Unidos quiere aportar su poderío económico y tecnológico reconocido, para que el pueblo cubano todo sea más feliz y próspero, recibiré esa rosa blanca con mucha alegría y comenzaremos a escribir una nueva historia entre nuestro dos países con respeto y agradecimientos, me recuerdo entonces lo que dijo John Lennon:

You may say I'm a dreamer

But I'm not the only one )

Llevo 25 años en este país, le doy gracias a la Argentina como país por haberme acogido, creo que he sido respetuoso con su historia, y con su gente, he tratado como buen emigrante de mimetizarme con el medio y no crear rancho aparte, eso me ha hecho mejor ser humano, porque no solo he absorbido su cultura, sino que he hecho mío, sus mejores valores humanos como sociedad, he disfrutado de su libertad de expresión, a pesar de los tintes rojos que llevan mi mirada, y a pesar que el actual gobierno, nos tilde de “zurditos de mierda”, he contribuido modestamente desde mi lugar de científico cubano formado por la Revolución Cubana, al quehacer tecnológico de este país y lo seguiré haciendo en la medida que el actual y los futuros gobiernos lo decidan así. Todo ello, esta bárbaro, pero Cuba seguirá estando ahí, clavada en algunas noches de insomnio, espero terminar mi vejez, sin temores, llevando una vida reposada, como dice la canción de Charly García, y el fantasma de ella, mi Cuba, sobre todo, cuando ya me empiece a quedar solo.

Después de 25 años en este fin del Mundo, ya a punto de cumplir 62, puedo decir que he cumplido la métrica que se le atribuye a nuestro Apóstol, José Martí, soy padre de la Camila, he sembrado mucho plátano microjet y he escrito en este libro abierto, llamado “La Luna de Noka” por unos 15 años, estoy muerto y muchos no lo saben, solo ven mi holograma que se empecina en seguir…Gracias a la vida que me ha dado tanto. 

MUJER EMPAPADA
 
Tengo pensado regresar
aunque en polvo sea
a esa esquina de tu falda
He pactado mi deseo final
para quien me siga,
así que no me pidas
ni pasaporte ni permisos
porque te he llevado encima
sin tantos papeleos
¿Podrás pensar de qué servirá entonces?
Si son manos amorosas y no limo
para seguir abriendo tu maleza
En eso estamos de acuerdo
y por ello, créeme, bufo
pero déjame, es mi suplica
volver a ese contén
donde me hice adverso
de todo lo que te ha maltratado
de todo lo que no te ha dejado ser
Al menos
mi lodo, que no se notará
con tanto barro caído
patentará ese mínimo secreto
que llevamos todos,
el que te sintió
nunca te olvida

 
















lunes, 13 de octubre de 2025

LA EXISTENCIA DEL HAMBRE ES UNA DECISION POLITICA
(Por Luiz Inácio Lula da Silva)

 

(Pamela dos Santos Pereira, una madre de 33 años con seis hijos, en la entrada de su casa cargando a su bebé de un mes Joao, junto a Debora, de cuatro años, en el centro, e Issac, de 6 años, a la izquierda, en Brasiliandia, uno de los vecindarios más pobres de Sao Paulo, en Brasil, el jueves 29 de septiembre de 2022 (AP))

El hambre no es una condición natural de la humanidad ni una tragedia inevitable, sino el resultado de las decisiones de los gobiernos y los sistemas económicos que han optado por ignorar las desigualdades. O incluso por promoverlas.

El mismo orden económico que niega a 673 millones de personas el acceso a una alimentación adecuada permite que un selecto grupo de 3.000 multimillonarios controle el 14,6 % del PIB global.

En 2024, las naciones más ricas contribuyeron a impulsar el mayor aumento de los gastos militares desde el fin de la Guerra Fría, que ascendieron a 2,7 billones de dólares ese año. Sin embargo, no cumplieron el compromiso que habían asumido de destinar el 0,7 % de su PIB en acciones concretas para promover el desarrollo en los países más pobres.

En la actualidad, vemos situaciones similares a las de hace ochenta años, cuando se creó la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Sin embargo, a diferencia de aquella época, ahora no solo tenemos las tragedias de la guerra y el hambre que se retroalimentan, sino también la urgente crisis climática. El acuerdo entre las naciones creado para resolver los desafíos de 1945 ya no responde a los problemas actuales.

Es necesario reformar los mecanismos globales de gobernanza. Debemos fortalecer el multilateralismo, crear flujos de inversión que promuevan el desarrollo sostenible y garantizar que los Estados tengan la capacidad de implementar políticas públicas coherentes para combatir el hambre y la pobreza.

Es fundamental incluir a los pobres en el presupuesto público y a los más ricos en el impuesto de la renta. Esto implica justicia fiscal y tributación de los superricos, un tema que logramos incluir por primera vez en la declaración final de la cumbre del G20 en noviembre de 2024, bajo la presidencia brasileña. Un cambio simbólico, pero histórico.

Defendemos esta práctica en todo el mundo y la hemos adoptado en Brasil. El Congreso brasileño está a punto de aprobar una reforma fiscal sustancial: por primera vez en el país, se aplicará un impuesto mínimo sobre la renta de las personas más ricas, y se eximirá del impuesto a millones de personas con salarios más bajos.

Además, al frente del G20, Brasil propuso la creación de la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza. Aunque es una iniciativa reciente, ya cuenta con 200 miembros: 103 países y 97 asociados, entre los que se encuentran fundaciones y organizaciones. No se trata solo de intercambiar experiencias, sino también de movilizar recursos y exigir compromisos.

Con la Alianza, queremos que los países tengan las capacidades necesarias para aplicar políticas que reduzcan eficazmente la desigualdad y garanticen el derecho a una alimentación adecuada. Políticas que den resultados rápidos, como los registrados en Brasil después de que, en 2023, eleváramos la lucha contra el hambre a la categoría de prioridad gubernamental.

Los datos oficiales publicados hace unos días muestran que hemos sacado del hambre a 26,5 millones de brasileños desde principios de 2023. Además, Brasil ha salido por segunda vez del Mapa del Hambre de la FAO en su informe sobre la inseguridad alimentaria en el mundo. Un mapa del que no habríamos vuelto si no se hubieran abandonado las políticas que se iniciaron en mis primeros gobiernos (2003-2010) y en el de la presidenta Dilma Rousseff (2011-2016).

Este logro es el resultado de acciones coordinadas en varios frentes. Hemos mejorado y ampliado nuestro principal mecanismo de transferencia de renta, que ahora llega a 20 millones de hogares, prestando especial atención a 8,5 millones de niños menores de 6 años.

También hemos ampliado los recursos destinados a la alimentación gratuita en las escuelas públicas, lo que beneficia a 40 millones de estudiantes. Gracias a la compra pública de alimentos, garantizamos ingresos a las familias de pequeños agricultores y distribuimos comida gratuita y de calidad a quienes realmente la necesitan. Además, hemos aumentado el suministro gratuito de gas para cocinar y electricidad a las personas con menos ingresos, lo que les permite destinar parte de su presupuesto a reforzar su seguridad alimentaria.

Sin embargo, ninguna de estas políticas puede sostenerse sin un entorno económico que la impulse. Cuando hay empleo e ingresos, el hambre se reduce. Por eso, adoptamos una política económica que priorizó el aumento de los salarios y nos llevó al índice de desempleo más bajo jamás registrado en Brasil. También conseguimos el índice más bajo de desigualdad de ingresos familiares per cápita.

Brasil aún tiene mucho camino por recorrer para garantizar la seguridad alimentaria de toda su población, pero estos resultados demuestran que la acción del Estado puede acabar con el flagelo del hambre. No obstante, para que estas iniciativas tengan éxito, es necesario cambiar las prioridades mundiales: invertir en desarrollo en lugar de en guerras, dar prioridad a la lucha contra la desigualdad en lugar de a las políticas económicas restrictivas que durante décadas han provocado una enorme concentración de la riqueza y afrontar el reto del cambio climático situando a las personas en el centro de nuestras preocupaciones.

Al ser sede de la COP30 en la Amazonia el próximo mes, Brasil quiere demostrar que la lucha contra el cambio climático debe ir de la mano de la lucha contra el hambre y la pobreza. En Belém, queremos adoptar una Declaración sobre el Hambre, la Pobreza y el Clima que reconozca los impactos profundamente desiguales del cambio climático y su papel en el agravamiento del hambre en ciertas regiones del mundo.

También llevaré estos mensajes al Foro Mundial de la Alimentación y a la reunión del Consejo de Campeones de la Alianza Global contra el Hambre, eventos en los que tendré el honor de participar hoy, día 13, en Roma. Mensajes que muestran que los cambios son urgentes, pero también posibles. Porque la humanidad, que ha creado el veneno del hambre contra sí misma, también es capaz de producir su antídoto.

---La vida se hace breve
para hacerla mejor;
espero que quien quede
viva para el amor...








 

jueves, 9 de octubre de 2025

SOBRE LA CRISIS ECONOMICA EN CUBA: Un apunte a su naturaleza y orígenes
(Por Joel Ernesto Marill Domenech
)

Desde el año 2019 la economía cubana viene enfrentando un escenario particularmente complejo, caracterizado por una alta inflación y escasez de bienes y servicios básicos, que han generado un descenso del nivel de vida de importantes sectores de la población. En la tabla siguiente se muestran algunos indicadores que permiten reflejar la profundidad del deterioro experimentado.

Tabla 1: Indicadores economía entre 2019 - 2023. Fuente: Anuario Estadístico 2024


UM

2019

2023

2023/2019

Producto Interno Bruto (real)

MMCUP

56,931

51,237

-10.9%

Producción Agrícola (real)

MMCUP

1,904

1,028

-46%

Producción Manufacturera (real)

MMCUP

6,080

3,877

-36%

Exportaciones (real)

MMCUP

10,478

6,896

-35%

Importaciones (real)

MMCUP

9,360

7,331

-22%

Oferta Monetaria (M2A)

MMCUP

106,755

390,216

366%

Tipo de cambio informal

CUP x dólar

25.5

222

870%

Deflactor Gasto Hogares

1997=100

170

2051

1206%

Salario medio estatal

Pesos de 1997

516.97

226.1

-56%

 

Por el lado de la oferta, entre 2019 y 2023 la producción agrícola se contrajo un 46% mientras que la manufactura lo hizo un 36%, en un contexto de caída de la producción global (PIB) de cerca de un 11%. Si bien la importación de bienes de consumo se ha incrementado en la etapa un 16% en términos reales, esto no ha permitido suplir la acelerada contracción en la producción interna. En su conjunto la caída en términos reales de las importaciones ha rondado el 22%.

Por su parte, por el lado de la demanda, en el mismo periodo la cantidad de dinero en manos de la población se ha incrementado en cerca de cuatro veces (366%), generando una espiral de presiones de demanda producto al exceso de liquidez sin respaldo productivo. El origen de esta acentuada expansión monetaria ha sido la acumulación de déficit fiscales que han obligado a la emisión de dinero por parte del Banco Central en el orden de los 250.000 millones de pesos cubanos.

La combinación de esta acelerada contracción de la oferta real, y expansión de la demanda ha terminado por reflejarse en una alta inflación, que ha terminado por licuar el valor de los salarios y pensiones reales. Medidos por el deflactor de los gastos de consumo de los hogares, los precios en 2023 respecto a 2019 se habrían incrementado en cerca de 12 veces, mientras que el tipo de cambio informal se habría depreciado en más de 8 veces. Como resultado, el salario medio estatal en términos reales se habría contraído hasta un 44% de su poder de compra respecto a 2019.

Naturaleza de la crisis: El rol central de los desequilibrios externos

La naturaleza de la crisis actual que sufre el país es sin lugar a dudas multisectorial, siendo posible identificar al menos seis dimensiones de esta —productiva, energética, de las cuentas públicas, cambiaria, bancaria y de deuda externa— que a su vez se encuentran profundamente entrelazadas. Por ejemplo, los descensos productivos impactan en la dinámica de las exportaciones, lo que a su vez priva al país de ingresos externos que son indispensables para enfrentar múltiples desafíos como la reanimación del sector energético, la intervención en el mercado cambiario o el impulso a la producción nacional. En sentido contrario, las restricciones en la disponibilidad de insumos y la inestabilidad del servicio energético, unido a la constante depreciación cambiaria generan perjuicios al sector exportador.

Lo anterior, es lo que en economía podría referirse como una crisis sistemática. Una crisis que no impacta en un aspecto particular —por ejemplo, el sector fiscal o financiero—, sino que afecta de forma simultánea a la totalidad de la estructura financiero-productiva. Una vez desatada este tipo de crisis, el reforzamiento de uno y otro aspecto es más la norma que una excepción. Los desequilibrios catalizan más desequilibrios. La escasez de recursos dinamiza más restricción de ingresos y más escasez. La economía entra en un círculo vicioso descendente sobre el cual debe actuar la política económica.

En este escenario donde varias dimensiones de la crisis se refuerzan unas a otras, se hace difícil identificar el eslabón más determinante, el nudo gordiano que debe ser desatado a fin de comenzar a requilibrar la economía. Por ejemplo, en la crisis económica libanesa de 2019, aunque se tradujo en una crisis sistémica, su origen estuvo en una crisis de deuda mayormente asociada al sistema financiero (Hausmann et al. 2023). Resolver ese aspecto fue el centro de la estrategia anti-crisis impulsada a partir de 2021 por el gobierno libanes. La cual demandó, vale la pena señalar, una ingente ayuda externa, incluyendo un préstamo del FMI por 3 000 millones de dólares.

En el caso cubano, múltiples temas se posicionan como candidatos a “nudos gordianos” de la actual crisis, desde deformaciones del modelo, la actual situación energética, hasta claramente los impactos del recrudecimiento de las sanciones norteamericanas. Sin embargo, un análisis detallado del escenario económico permite hacer converger todos estos elementos en un mismo aspecto: la crisis económica cubana es esencialmente una crisis determinada por las restricciones del sector externo, por el descenso sostenido de nuestros ingresos por exportaciones y por el impacto que este proceso termina teniendo sobre toda la estructura económica del país.

Esta idea se sistematiza en términos generales en el siguiente esquema: 

 


La caída de las exportaciones determina de forma simultánea: a) el descenso de la capacidad de importar insumos productivos, lo que termina desencadenando la contracción de la producción nacional y una crisis productiva multisectorial, b) igualmente reduce la capacidad de pagos externos del país, dinamiza la acumulación de deuda externa y reduce la capacidad de atraer inversores extranjeros, c) la contracción de la importación de bienes de capital paraliza la capacidad de expandir la producción y acelera la crisis energética, que a su vez impacta igualmente la producción, d) finalmente la caída de los ingresos externos —y de las reservas internacionales—, impacta la estabilidad cambiaria y la posibilidad de defender un tipo de cambio único y estable para toda la economía.

A su vez, este escenario termina impactando fuertemente los ingresos reales de las familias. Los ingresos nominales —medidos en dinero— derivan su valor de la capacidad de la economía de generar una contrapartida material en bienes y servicios a esos ingresos. Y esta oferta agregada, en una economía restringida en ultima instancia por la balanza de pago, está determinada por la generación de ingresos externos, fundamentalmente por la capacidad de generar exportaciones que permitan pagar por los compromisos externos e insumos críticos que requiere el tejido productivo del país.

A pesar de que el país sufre otros muchos desequilibrios relevantes —como monetarios y fiscales—, el problema fundamental de la economía cubana no es el déficit fiscal ni cantidad de dinero en circulación —aunque esto tenga impacto inflacionario—, sino la escasez de bienes y servicios. El consumo de los ciudadanos está limitado por la falta de productos disponibles, no por la cantidad de dinero que tienen. Los cubanos, en su conjunto, somos más pobres que en 2019 porque la economía produce menos y por tanto nuestros salarios reales y nivel de vida se ajustan a esa contracción productiva.

Una pregunta fundamental surge en este punto: ¿Qué factores estuvieron en el origen de la crisis?

Orígenes de la crisis: Dinámica precedente y los shocks externos del periodo 2019-2021

Aunque los efectos más profundos de la crisis comenzaron a darse a partir del año 2019, la dinámica de acumulación de desequilibrios que ha llevado al escenario actual comenzó a gestarse varios años antes. Como muestra el Gráfico 1, las exportaciones cubanas comenzaron a experimentar un declive significativo a partir del año 2012, con una caída de más del 33% para 2019. Esto llevó a hacer desaparecer el superávit comercial reportado en 2012 de casi 4 000 millones para 2019.

A partir de 2015, el recrudecimiento de las sanciones a Venezuela generó una fuerte tensión en nuestro comercio exterior. Cerca del 44% de nuestras exportaciones de bienes estaban dirigidas a dicho país, mientras que el principal rubro de exportación cubano estaba constituido por “combustibles y lubricantes” —altamente dependiente de la importación de crudo desde Venezuela— que representaron más de 2 690 millones en 2012, posicionándose como el mayor rubro exportable de bienes y la segunda categoría que más ingresos generaba después de la exportación de servicios médicos.

La recesión de la economía venezolana contribuyó especialmente al descenso de las exportaciones —fundamentalmente de bienes—, a la vez que puso de manifiesto una debilidad profunda de nuestro modelo: un esquema de inserción internacional altamente dependiente de acuerdos intergubernamentales, especializado en servicios profesionales con escasos encadenamiento hacia lo interno, y una alta dependencia en la exportación de productos de bajo valor agregado, que además se habían comenzado a estancar desde hace varios años.

Gráfico 1: Ingresos externos (izquierda) y endeudamiento externo sobre exportaciones (derecha)

 


La dificultad en el desarrollo de nuevos productos de exportación, sumada al estancamiento de rubros tradicionales, dificultaron suplir la pérdida de ingresos derivada de la crisis venezolana. Sin embargo, el lento, aunque persisten declive de las exportaciones en la etapa 2015-2019 no hicieron en un primer momento contraer el nivel de actividad, aunque si ralentizaron su ritmo de crecimiento. Dos flujos permitieron suplir temporalmente la caída de exportaciones: las remesas y el endeudamiento externo.

Las remesas como se observa en el Gráfico 1, se estima pasaron de los casi 2 000 mil millones en 2011 al entorno de los 4 000 millones en 2019. Este incremento permitió suplir fuertemente el declive de las exportaciones, aun y cuando esto no impactó en un cambio de la matriz productiva que hiciera avanzar en la solución de los problemas de baja competitividad que lastraban al tejido exportador.

Por su parte, el endeudamiento externo creció de forma constante en el periodo, tanto en términos absolutos —desde los 13 500 millones de dólares en 2011 a más de 19 700 millones en 2019— como especialmente en términos relativos. Como muestra el gráfico 1, respecto a las exportaciones el endeudamiento creció de un 80% en 2011 a casi un 260% en 2019. Esto supone un reto especialmente complejo para una economía como la cubana, en la cual las exportaciones suponen la fuente fundamental para honrar sus compromisos de repago de la deuda externa en el mediano plazo.

A la altura de 2018 y 2019 la economía cubana se encontraba sin dudas en un escenario difícil. En un contexto externo mucho más adverso y en los límites de su capacidad para seguir endeudándose. Sin embargo, a pesar de dicho contexto resulta difícil imaginar cómo se hubiera podido alcanzarse la gravedad del escenario actual sin la serie de shocks externos que se produjeron entre 2019 y 2021.

Shocks externos: Bloqueo, pandemia y deterioro de los términos de intercambio

El primer factor, y más determinante, fue el recrudecimiento de las sanciones de Estados Unidos, que afectaron directamente dos de las principales fuentes de ingresos externos que quedaban al país: turismo y remesas. Estas medidas no solo complejizaron las transacciones bancarias internacionales, sino que también limitaron el suministro de combustible, paralizando la producción y restringiendo la operatividad de las empresas. Para una economía ya financieramente debilitada, estas sanciones suponían un nuevo peso sumamente difícil de afrontar, incluso en mejores condiciones de partida.

El segundo factor clave estuvo en el impacto de la pandemia de COVID-19, que marcó el inicio de la crisis actual con una caída masiva de los ingresos externos. Más de 4 700 millones de dólares en exportaciones se perdieron entre 2019 y 2021, el 47% asociado a la casi virtual desaparición de los ingresos turísticos, un 21% asociado a la reducción de la exportación de servicios médicos, mientras que los bienes en su conjunto aportaron un 7.5% de esta caída.

Finalmente, el deterioro de los términos de intercambio agravó una situación ya compleja. Entre 2019 y 2023 los precios de las importaciones cubanas crecieron como promedio un 11% más que los precios de exportación, lo que implicaba que el país debía generar casi un 11% más de bienes o servicios exportables para poder importar la misma cantidad de bienes externos.

Estos impactos súbitos sobre el precio de nuestras importaciones, y la caída de ingresos externos, precipitaron una rápida reducción de las capacidades de pago del país, lo que contrajo el nivel de importaciones y los pagos de compromisos externos. Este proceso generó a su vez una escasez de insumos productivos, con profundos impacto en gran parte de la producción y las inversiones en proceso. Estos shocks en el sector externo, en una economía ya financieramente debilitada, indujeron una crisis de balanza de pagos —de la capacidad del país de importar y pagar deudas— que se propagó rápidamente por todo el tejido productivo y que a la postre terminaría generando profundas dificultades para la reactivación del propio sector exportador.

Apuntes finales

En general se comparte el diagnóstico de varios colegas que enfatizan en el carácter sistémico de la crisis. Así como que la economía cubana presenta deformaciones de larga data que no se originaron en el período 2020/2021, a raíz de los shocks externos que desencadenaron la crisis, sino que venían lastrando el desempeño económico desde mucho antes y, en gran medida, estuvieron en el origen del proceso de actualización del modelo iniciado en 2011. No obstante, en el escenario actual resulta necesario introducir dos distinciones claves a este análisis:

En primer lugar, si bien la crisis es de carácter sistémico, no todas sus dimensiones imponen el mismo grado de restricción sobre el desempeño económico, ni todas contribuirán en igual medida a su solución. En un contexto de severa escasez de recursos materiales y humanos, junto a un amplio abanico de prioridades y ámbitos que demandan transformación, la adecuada focalización de los esfuerzos y recursos en los factores más determinantes constituye un asunto de máxima relevancia.

En segundo lugar, aunque la implementación de reformas estructurales profundas resulta indispensable para sentar las bases de un crecimiento sostenido en el mediano plazo, en el corto plazo el eje de las transformaciones debe orientarse hacia un objetivo mucho más pragmático y con capacidad de un impacto transversal: el incremento de los ingresos por exportaciones del país.

Para crecer a mediano plazo, la economía cubana demanda de reformas profundas, muchas de las cuales se arrastran desde los mismos inicios de la actualización del modelo. Sin embargo, también es necesario reconocer que en el contexto actual de tanta restricción de recursos materiales y financieros muchas de dichas reformas terminarían teniendo en la práctica un impacto reducido si las mismas no contribuyen en igual medida a flexibilizar la restricción externa que hoy enfrenta la economía.

Esto no significa que no sea necesario impulsar trasformaciones sectoriales o avanzar en reformas pendientes, sino que el éxito de muchas de esas medidas —desde el mercado cambiario, la autonomía de la empresa estatal, la descentralización, la expansión de actores no estatales, hasta las medidas para recuperar el sector cañero o agrícola— van a depender de que algunos sectores críticos logren generar los ingresos externos que permitan al resto de la economía funcionar coherentemente.

Sin insumos productivos importados —fertilizantes, plaguicidas etc.— es difícil imaginar cómo se lograrán recuperar los niveles productivos de la agricultura para satisfacer la demanda del país. Sin ingresos externos no hay forma de defender un tipo de cambio estable. Y la gran mayoría de empresas estatales y privadas orientadas al mercado interno, pero altamente dependiente de materias primas importadas, no podrán incrementar su producción o oferta de bienes finales a la población. La autonomía de la empresa estatal sin recursos, es en el fondo una entelequia.

La economía cubana se enfrenta a un escenario de crisis —expresada en la escasez de recursos y la desarticulación del esquema productivo— que impone una secuencia diferente de transformaciones que las que podría haberse dado en una reforma económica en otro contexto. Priorizar aquellas trasformaciones institucionales o redistribución de los escasos recursos, que permitan la generación de ingresos externos y la flexibilización de la restricción externa constituye hoy quizás la prioridad fundamental de una estrategia de recuperación y crecimiento de la economía.

Indudablemente en este punto pueden imponerse muchas preguntas importantes: ¿Cómo se recupera exportaciones en un contexto de tantas restricciones de recursos y de un bloqueo recrudecido que persigue cualquier intento de recuperación en el sector turístico o de servicios profesionales? ¿Cuáles son las principales deformaciones internas, que, junto al bloqueo, limitan el despegue de las exportaciones? ¿Qué oportunidades se abre para Cuba en las nuevas dinámicas geopolíticas internacionales, y como podemos aprovecharlas? ¿Cuánto es el nivel de exportaciones que sería necesario para recuperar el nivel de vida de 2019 para la gran mayoría de los cubanos?

Todas estas son cuestiones vitales para el país, y en el mismo sentido sumamente complejas. Por limitaciones de espacio, sería difícil abordarlas todas coherentemente en este mismo documento, pero constituirán en su mayoría los temas centrales de una segunda parte de este trabajo.



 

miércoles, 1 de octubre de 2025

EL DEFICIT PINOCHO

 


Milei está a punto de llegar a sus dos años de gobierno, parece que lleva muchos años, su gobierno nos abruma porque lo que vimos en años anteriores, lo volvemos a ver, pero más rápido, su anarco capitalismo es de una voracidad impactante, su destrucción del estado es a pasos agigantados, a eso vino y no es de extrañarnos su praxis cotidiana, en esto último no nos mintió.

La Argentina es una sociedad económica bimonetaria, nadie puede refutar esa expresión a esta altura, sobre todo, después de tanta agua debajo del puente. Por tanto para entender cualquier modelo económico que se proponga, es importante  analizar que se va hacer con la moneda nacional, el peso argentino, y los verdes que te quiero verde, que se imprimen, allá lejos en el norte y que desde 1974 con el acuerdo con Arabia Saudita por los petrodólares, sigue siendo la moneda “que todos quieren”, porque además supo imponerse primero, también, en aquellas negociaciones al final de la Segunda Guerra Mundial, donde resurge como Imperio Único, en los Acuerdos de Bretton Woods de 1944, y que luego Nixon unilateralmente lo rompió aquella emperadora noche del 15 de Agosto de 1971.

Hay una premisa que se repite desde el gobierno, y que en su batalla cultural ha calado hondo no solo en el medio político, sino entre la población en general. Se puede enunciar así: “Con déficit cero en las cuentas públicas, la inflación, que es siempre un fenómeno monetario, se derrumba estrepitosamente”. Lo anterior es una verdad parcial en el caso de la Argentina, pero, este gobierno efectivamente heredó una inflación del Gobierno de Alberto y Cristina de 211% anual en el 2023, y con ese enunciado, que no es más que un ajuste feroz de los gastos estatales, la llevo a 118% en el 2024 y este año 2025 por ahora rondaría entre un 30-35%, esto sin duda alguna, ha sido el mayor logro económico obtenido por este gobierno, a pesar del costo social de gran envergadura.

Sin embargo, el concepto de déficit, debe concebir todo, en principio es la diferencia entre lo que recibe el Estado, como un todo, y el gasto que ese mismo Estado realiza, y aquí es donde, en el caso Argentino, el modelo de déficit cero hace agua, en otras palabra yo le llamaría al déficit cero con que el Gobierno enarbola sus banderas triunfantes, un déficit pinocho, porque en el mismo no tiene en cuenta la deuda que asume el Estado Argentino, no solo con los Organismo Internacionales de Crédito, sino inclusive con fondos y bancos nacionales e internacionales que compran bonos de deuda Argentina.

Milei efectivamente ha logrado reducir el dinero circulante con su ajuste brutal a muchas prestaciones estatales, que incluyen los jubilados, los discapacitados, las universidades y la obra pública, además el hecho de que las paritarias sectoriales del salario de los trabajadores siempre han ido a la baja con respecto a la inflación reinante, el salario real se ha ido quedando atrás y ha hecho posible, que el consumo se haya desplomado no solo durante 2024 en un 20%, sino que este año 2025 va por el mismo camino con respecto al año anterior, que ya era bajo, todo lo anterior explica de alguna manera el único logro (con sufrimiento) que puede exhibir el gobierno de Milei, la baja de la inflación, sin embargo hay un dinero, en pesos argentinos, circulando en el tema de deuda en bonos, que hace inestable el sistema económico en general, precisamente por ser una economía bimonetaria, y la presión de este sobre el valor del dolar. Ese dinero argentino de deuda en bonos (de todos los colores), no es tenido en cuenta en los sistemas contables de Caputo y su banda a la hora de hablar de déficit cero del Estado, y es el que precisamente provoca una aspiración constante de dólares, que por otra parte no se obtienen genuinamente por exportaciones argentinas, sino por más deuda con organismos internacionales como el FMI y otros, con fondos de inversiones golondrinas y bancos extranjeros, etc., que vienen  hacer el famoso carry trade, vendiendo sus dólares, comprando bonos en pesos argentinos con altas tasas de intereses, que luego reconvierten a dólares y fugan los dividendos que esos bonos le proporcionan, obteniendo rentabilidades fabulosas que no se consiguen en ninguna otra parte del Mundo, rondando el 10% mensuales en dólares. La dinámica anterior descrita ha convertido a la Argentina de Milei en un barril sin fondo aspirando dólares de deuda de todo el Mundo, tal es así que como nadie le quiere prestar después de dos años, y el agua ha llegado más allá del cuello, han acudido de rodillas hace apenas una semana al tesoro de los Estados Unidos, para que los salven.

Así que nos han mentido, cuando expresan que el déficit de las cuentas públicas es cero y que ello ha hecho la maravilla de que tengamos una inflación a la baja. La operatoria para haber obtenido efectivamente una inflación a la baja, tiene dos aristas, por un lado, los salarios no alcanzan con la suba de los servicios públicos y otras yerbas, y la baja de los salarios reales de los trabajadores han disminuido grandemente su consumo, con lo cual los precios no pueden subir mucho porque no se venden los productos, y por otro lado ha sido, pisando y controlando al máximo el valor del dólar por medio de contraer cada vez más deuda en dólares, que por otra parte le ha obligado a imprimir papelitos, llamados, pesos argentinos. Es decir, el sistema económico planteado por Milei “funcionó” no por el déficit cero que tanto pregona, y que nos ha hecho padecer con su ajuste brutal, sino porque ha gastado más en deuda en dólares que lo ingresado por exportaciones para mantener el dólar relativamente quieto, así que ese discursito de que el Estado no debe gastar más que lo que recauda, se cae a pedazos, al NO incluir los dólares adeudados convertidos a pesos, en una economía bimonetaria como la Argentina.

Las exportaciones totales argentina desde Enero a Diciembre de 2024 alcanzaron un total de 79 721 millones de dólares, esta es la cantidad genuina de dólares con que cuenta un Estado para encarar genuinamente sus gastos, y de ahí debería partir todo, incluyendo pagar sus deudas pasadas, gastar más allá de lo anterior implica endeudarse, si para colmo es un país con una amplia trayectoria defaultiana de su deuda, cada vez te van a solicitar intereses mayores, un índice que lo determina es el famoso riesgo país, que en la actualidad ronda los 1200 puntos, que representa un tasa de interés del 12% más el valor de tasa de los bono que emite el tesoro en USA, que hoy andan por los 4.15%, es decir el riesgo país actual de la Argentina representa tasas más allá de los 16%, es decir, no te prestan, por eso la genuflexión actual de Milei ante Trump. Por otra parte la cantidad de dólares que ha gastado el estado para mantener un dólar relativamente planchado y de ahí su verdadera baja de la inflación, ha sido abismal, y esto se ha visto en todos los dólares gastados que tenemos noticias, se gastó 20 631 dólares del Blanqueo de Capitales que su primera etapa fue del 1 de Octubre al 8 de Noviembre de 2024, se gastó 15 124 millones en el famoso dólar blend para los exportadores (donde un 80% se liquidaba al dólar oficial y un 20% al dólar MEP/CCL), 10 mil millones en los BOPREALES 1, 2 y 3 para deudas de los importadores (en honor a la verdad de la gestión de Alberto y Cristina), 3 mil millones en los REPO con los Bancos para la liquidez del Banco Central, 12 396 millones y 2069 millones de dolares que le dio el FMI en dos desembolsos con el acuerdo de Abril de 2025, 6263 millones de dolares que le dieron otros organismos como el BID y el Banco Mundial, 1500 millones de la emisión del BONTE 2030 del Tesoro Argentino para atraer inversiones extranjeras, y 21 687 millones de dólares por recaudación en la baja de las retenciones a la producción del campo argentino. Si sumamos todo lo anterior gastado por el estado en dolares para mantener el dólar relativamente quieto llegamos a la frijolera suma de 93 210 millones de dolares, en pocas palabras SE GASTA MAS QUE LO QUE INGRESA, así que ¿dónde está el famoso déficit cero, en una economía bimonetaria como la argentina?. Para que se tenga una idea, en los primeros 6 meses del 2025, 1.5 millones de argentinos, compraron dolares por un total de 12 500 millones solo para atesorarlo en sus “colchones caseros”.

Si miramos la fluctuación del dólar con respecto al peso en la Argentina desde que asumió Milei, este paso de 800 pesos por dólar en Diciembre de 2023, a 1400, ayer 30 de Septiembre de 2025, es decir ha tenido una devaluación del 75%, pero la inflación ha sido del 138 % desde Diciembre de 2023 a Agosto 2025. Lo que ha marcado siempre la inflación en la Argentina es el valor del dólar, por ser una economía bimonetaria, la diferencia del 63% no devaluado en el valor del dólar por mantenerlo pisado, es en lo que ha gastado el Estado argentino o sea nosotros, endeudándose en dólares, un Estado así no puede hablar de déficit cero, es más bien un déficit pinocho y esa mentira que en algún momento tendremos que pagar NOSOTROS, nos va a costar sangre, sudor y lagrima.



...Después de mil fracasos como estos
Me sentí muy tonto, me habían engañado
Nos habían engañado
Y me fui a buscar al primer hombre que mintió, que mintió...








 




 

martes, 23 de septiembre de 2025

martes, 2 de septiembre de 2025

DOS
 
Dos animales astutos
perdidos en el espacio
girando, circulares
buscando el amor
Dos almas en calma
con la suerte
de quien no ensaya
Dos pecadores del deseo
apretados, mordiendo
una primavera
hasta desfallecer
Dos intrusos de la vida
que un día dos
de un pequeño abril
miraron por la ventana
y los cegó
el amor






jueves, 28 de agosto de 2025

Acuérdense somos una especie animal 
en un planeta que hace 4600 millones de años 
gira alrededor de su estrella,
somos gente circulares.

RECUPERAR LA CONTINGENCIA


Es posible que mis primeras palabras sean un poco filosóficas, y acudan a Nietzsche, ¿y qué carajo tiene que ver esto con lo que está sucediendo con el escándalo de las coimas de la hermana de Milei?, créanme (ya sé que es a lo que más apelamos los seres humanos, al creer), todo tiene que ver con todo.

Repito algo que escuché de Darío Sztajnszrajber (por cierto, en honor a la verdad hice copy page de su apellido, por obvias razones), cuando se refería al libro de Nietzsche, Así habló Zaratustra, y Darío dice, “Nietzsche es el pensador de la contingencia, ¿y que mierda es la contingencia?, la contingencia es la convicción que todo puede ser de otra manera. Si las cosas se plasman de un único modo, es porque detrás de ese unilateralismo, hay alguien, hay una voluntad de poder, a la que le conviene, y necesita imponer su propia lógica, por sobre la del resto…”.

Por otra parte, en esa charla que escuche de Darío, el plantea lo importante de recuperar la contingencia, recuperar el sentido mismo, de que todo puede ser de otro modo y es aquí donde estas reflexiones del filósofo argentino me llevan a Milei.

Milei y su hermana Karina con su armado político, nos han hecho creer, que hay una sola y única forma de sacar a la Argentina de su decadencia política y económica, ha habido una intensión de poder de que su lógica económica y política, sea la lógica del resto, y hasta la aparición de los audios de Spagnuolo, responsable de la Agencia Nacional de Discapacidad, íntimo amigo de Milei,  que incriminan a Karina y a su segundo, el “Lule” Menem (vaya que estirpe) parecía que la lógica Mileista ganaba adeptos en cantidades industriales.

¿Y cuál era esa lógica?, ha sido la lógica neoliberal que se empezó a probar en Chile, después del golpe de estado de Pinochet a Salvador Allende, en Septiembre de 1973, en Estados Unidos con Reagan, y en el Reino Unido con Thatcher a principio de los 80, pero acá en esta ocasión además, se le agrego “lo libertario”, que está mejor descrito por uno de los informes reciente de Morgan Stanley en Wall Street para sus clientes inversores sobre la Argentina actual, “la promesa ideológica de reformas muy significativas para reintegrar Argentina a los mercados globales de capital y emprender un camino de liberalización y crecimiento sustentable de ganancias”, en otras palabras menos “elegantes”, abrir el país a la depredación financiera internacional.

Y en ese mismo informe se describió lo que ha sucedido hasta el momento por esa lógica libertaria, “la devaluación ocurrida en 2023 y 2024 permitió un crecimiento de utilidades en dólares de aproximadamente 20%”. Es decir, se han beneficiado como en ningún otro país del Mundo de la timba financiera y con valores de ganancia no habituales.

La lógica libertaria de Milei, es también llevar a extremos crueles cualquier política estatal que pretenda atender a los más débiles, para su cosmovisión, el Estado no tiene que inmiscuirse en la feroz guerra social de la selva, llamada “mercado”, en esas circunstancias animal “del sálvese quien pueda”, el que no esté apto para sobrevivir, perecerá en el intento y el Estado en su primera etapa, ante su definitiva destrucción, será un simple observador, que resguardará por sobre cualquier cosa, la propiedad privada sobre los medios de producción y más específicamente la renta financiera.

Lo anterior expuesto se traduce en varias medidas que ha tomado el Gobierno de Milei a lo largo de su corta gestión, de apenas un año y nueve meses. Entre ellas se encuentran, el drástico recorte en las prestaciones médicas en la Agencia de Discapacidad, en la perdida formal de los ingresos mensuales de los jubilados y pensionados, en los recortes en la salud pública, hasta tal punto, de ahogar a un Hospital de Niño como el Garraham, donde se atienden enfermedades complicadas, un lugar de excelencia médica y humana, que como he escuchado a muchos padres decir, “se construye la esperanza”, es el lugar donde los padres entran con sus hijos enfermos, en muchos casos enfermedades “terminales”, y reciben una atención tal, que salen de allí con ilusión y confianza de que van hacer todo lo posible por encontrar una cura. Sin embargo ahí no ha quedado su accionar cruel, hay otras áreas en las que ha ajustado sin miramientos, que tienen una implicancia social, que más nadie que no sea el Estado se va a ocupar en el futuro, digamos la educación de todos los niveles incluyendo la superior, agencias que controlan la producción y distribución de alimentos y medicamentos, incluyendo la que controlaba el fentanilo, que ha provocado la muerte de 100 pacientes, que lo consumieron como medicina y que estaba mal fabricada.

Encima de todos esos ajustes crueles, y mientras lo hacían, se descubre ahora, que había una trama de corrupción en muchas de esas Agencias y Organismos, bancada y hasta promovida por la cúpula más cercana a Milei, en este caso su hermana Karina y su segundo al mando en la Secretaria de la Presidencia, ¿con fines recaudatorios para hacer política y para favorecer empresas privadas a fines?, es algo que tendrá que investigar la justicia, y es ahí en ese accionar de malversación de fondos públicos, donde la lógica de la crueldad se manifiesta en su máxima expresión, pues se cae el andamiaje que han sostenido, que todo lo que hacían era para lograr una Argentina distinta y prospera.

Es grave lo que ha ocurrido y espero que aquellos que apoyaron la irrupción vergonzante de Milei en la política argentina, por el hartazgo para con lo anterior, y no como vinculación con la ideología libertaria, estén en este primer momento haciendo duelo por la defraudación recibida, que más tarde se reflejará, sin temor a equivocarme, en un “que se vayan todos”, tipo 2001, pues la alternativa política que compite en este momento, es un poco más de lo mismo de lo que se ha vivido en el pasado.

Pero hay a su vez otra lógica mileista que se ha tratado de instalar, de ahí la batalla cultural que tanto pregonan desde el gobierno, y es la lógica del mercado financiero, y se sintetiza, en que esta bueno, muy bueno para ellos, que los bancos reciban una obscenidad de ganancias, a través de tasas de interés altísima en las LECAPs y otras yerbas financieras, mientras se le pone un cepo a los salarios de los trabajadores, los jubilados y los pensionados, en aras de mantener un valor de dólar estable, que con su subida puede repercutir en la inflación de todos los productos y servicios que se ofrecen en el mercado. Es la lógica de la injusticia a flor de piel y que ha contado hasta ahora con el apoyo de grandes mayorías de argentino, debido, fundamentalmente, a su trauma histórico, la inflación.

Por ultimo como tercera lógica que se quiere instalar, es la lógica de la confrontación violenta, una lógica que no es exclusiva del Mileismo Libertario y que copia la etapa más oscura del Gobierno de Cristina Kirchner, cuando se escupía en las plazas a las fotos de los periodistas “independientes”, se escrachaba violentamente a todo aquel que no simpatizaba con el Cristinismo de la época. Milei ha doblado la apuesta, con su verborragia violenta y pornográfica que no tiene paragón en la historia reciente de la Argentina, de hecho, ayer recibió algo de su propia medicina, en el escueto paseo electoralista en camioneta, por Lomas de Zamora, un poco también para desviar la atención del escándalo de las coimas  en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) que involucra a su hermana, sabiendo además que hay una parte de la sociedad (el 60% al menos) que no lo quiere para nada y menos ahora con esta situación de corrupción, después de haber vetado la Ley de emergencia en Discapacidad, hace apenas 21 días atrás.

Es entonces que se hace necesario para la intelectualidad política y para el accionar político concreto en este país, acudir a la recuperación de la contingencia, a la instalación por ahora de ese “post” del que nos habla Darío sobre Nietzsche en su charla, es posible y necesario un “postmilei”, convencer al menos (que no es poco), que, de otra manera, alejada del individualismo acérrimo y cruel, se deben encarar los acuciantes problemas con que cuenta la Argentina y sobre todo que una sociedad que no cuida a los más débiles, es una sociedad injusta y no merece el respeto de las demás.