Debo alabar y agradecer cada instante del tiempo.
Mi alimento es todas las cosas.
Mi alimento es todas las cosas.
(“El Cómplice”, Jorge Luis Borges)
Hay un corredor de tarjetas
unos arcoiris de presentación
un muslo cortado
con tu abdomen
un escalofrío mañanero
a punto de celebrar
Nunca mas
de sorpresa
de morir en un arroyo
esperando tarde
tus piernas
sobre mis manos
por congelar
Hoy viene este sentir de años
ocupándome de mirar
unos ojos del pasado
que me enseñan
el viejo por andar
Vaya turno de desnudo
loco, sufro
que es amar