LEGITIMIDAD
POLITICA DE ORIGEN
Ayer participe comentando en un
post escrito por Iroel Sánchez en su blog “La Pupila Insomne” que dejo a
continuación, al final del mismo deja el autor la intervención de Fidel en la Asamblea Nacional el 27 de Diciembre de 1991 como fundamento de los cambios que
entonces se registraron en la Constitución Cubana en 1992 con respecto al
sistema eleccionario cubano (http://www.cuba.cu/gobierno/discursos/1991/esp/f271291e.html).
Este
domingo se nominaron en Cuba los candidatos a diputados la Asamblea Nacional y
a delegados a las Asambleas Provinciales del Poder Popular, que se someterán el
11 de marzo al voto popular.
Como
buena parte de la prensa occidental silencia este proceso, cuando no lo trata
de descalificar, insistiendo en que no participan partidos políticos o diciendo
que el único participante es el Partido Comunista, cuando el Partido no nomina
y de hecho muchos delegados y diputados no son ni han sido militantes comunistas, intento una breve
descripción del proceso, acompañada del que me parece el razonamiento público
más completo que Fidel hizo sobre el tema, donde expresó la idea que he
colocado entre comillas en el título de este post y considero el objetivo
esencial del sistema.
La
nominación la realizan los miembros de las Asambleas Municipales del Poder
Popular (delegados), nominados en asamblea abierta de vecinos en cada
circunscripción y luego sometidos al voto secreto de los electores. La Asamblea
Municipal, conformada por esos delegados nominados y electos por el pueblo, es
la que hace lo que en la mayor parte de los países realizan los partidos
políticos: aprobar las listas de candidatos que serán sometidas al voto
popular; para ello se conforman en cada municipio, provincia, y a nivel
nacional, Comisiones de candidatura que le proponen a la Asamblea municipal las
listas de precandidatos que serán sometidos luego al voto popular y tiene la
misma cantidad de precandidatos que plazas de delegados y diputados a ocupar.
La lista de candidatos que se someterá al voto popular debe cumplir con que la
mitad de sus integrantes sean delegados a las Asambleas Municipales, nominados
y electos ya como tales por el pueblo.
Las
Asambleas Municipales quedaron constituidas luego de concluidas las elecciones
a las Asambleas Municipales cuya primera vuelta se efectuó el pasado 26 de
noviembre. Las presidencias de estas asambleas fueron resultado de una votación
secreta de una candidatura conformada a partir de las consultas de la Comisión
de candidatura con cada uno de los delegados electos.
Las
Comisiones de candidatura están integradas por representantes designados por
las organizaciones populares reconocidas en la Constitución cubana (Central de
Trabajadores de Cuba, Asociación Nacional de Agricultores Pequeños, Federación
de Mujeres Cubanas, Comités de Defensa de la Revolución, Federación Estudiantil
Universitaria y Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media) que a su vez
tienen regularmente procesos desde sus bases donde se renuevan sus direcciones
a todos los niveles en los que participan millones de cubanos.
Las
Comisiones de candidatura provincial y nacional tienen dos fuentes para
conformar las listas de precandidatos a delegados a las Asambleas provinciales
y diputados a la Asamblea Nacional que someten a las Asambleas Municipales: Los
delegados que resultaron electos para integrar las Asambleas Municipales del
Poder Popular propuestos por la Comisiones de
Candidaturas Municipales a partir de la entrevista personal con todos los delegados a esa instancia a los
que solicitan propuestas, también aquellos que no sean delegados de las
Asambleas Municipales del Poder Popular y que sean propuestos por la Comisiones
de Candidaturas provinciales y nacional a partir de los plenos de las
direcciones electas de las organizaciones populares que representan.
Cuando
las listas de las precandidaturas son presentadas a las Asambleas
Municipales, cada delegado tiene en esa
Asamblea la posibilidad de intervenir para objetar cualquier persona incluida
en las listas y, de ser así, el presidente de la Comisión de candidatura tiene
la obligación de someter a votación esa objeción que de obtener la mayoría de
los votos lllevaría a proponer un nuevo candidato. Los delegados deben aprobar
nombre a nombre de la candidatura por voto directo y público de al menos la
mitad más uno de los miembros de la Asamblea, de alguno no obtener la mitad más
uno de los votos se somete un nuevo precandidato a votación. Este paso es el que sucedió, cuando este 21
de enero las Asambleas Municipales de delegados nominados y electos por el
pueblo aprobaron las candidaturas que serán sometidas al voto de los electores
el próximo 11 de marzo.
A
partir de hoy los nombres de los candidatos y sus biografías serán dados a
conocer en un proceso donde están prohibidas por ley la propaganda y el dinero,
y el 19 de abril la Asamblea Nacional por voto directo y secreto elegirá de su
seno, a partir de la precandidatura propuesta por la Comisión de candidatura
nacional, después de su consulta con
cada uno de los diputados electos, la candidatura primero a la presidencia,
vicepresidencia y secretaría de la propia Asamblea y luego el Consejo de Estado
y su Presidente y Vicepresidentes. Esas candidaturas deben ser aprobadas de
manera abierta y pública antes por voto de la mitad más uno de los miembros del
pleno de la Asamblea Nacional.
Los
delegados y diputados del Poder Popular cubano no se dedican profesionalmente a
esa labor, excepto una minoría que
preside los Consejos Populares -conformados por varios delegados de base en uno
de los territorios en que se divide un municipio-, las Presidencias, y
Vicepresidencias de las Asambleas municipales, provinciales y Nacional, así
como una parte de las Comisiones Permanentes de trabajo de esta última
instancia.
El
actual sistema es resultado de una reforma de la Ley electoral que se aprobó
por la Asamblea Nacional el 29 de octubre de 1992, por recomendación del IV
Congreso del Partido Comunista de Cuba, pues hasta entonces eran los delegados
a las Asambleas Municipales quienes elegían los diputados a la Asamblea
Nacional y los delegados a las Asambleas Provinciales; entró en vigor por
primera vez sen 1993 y aun es perfectible pero también muy superior a las
elecciones que -signadas por el dinero y la demagogia- tienen lugar en la
mayoría de los países occidentales.
Se viene el cambio
generacional en la dirección política de Cuba y en esa vorágine se encuentra
participando el pueblo cubano. Diríamos que el voto cantado de Díaz Canel como
Presidente del Consejo de Estado y por tanto de la República de Cuba, es
evidente.
Podría uno decir que el hecho de que todo comienza en Asambleas
Barriales sin la intervención de partidos, le proporciona una legitimidad
política de origen a todo el sistema sin precedente en la historia humana, y
aunque parecen palabras grandilocuente, invito a que se me presente en el Mundo
Capitalista algo realmente de similar valor para la postulación y elección de
parlamentarios, congresistas o como se les quiera llamar, no solo que no tengan
un peso partido al medio, sino que representen verdaderamente los intereses de
un pueblo y no los de alguna corporación financiera o industrial, o peor los
intereses de un partido político que los coloca en esa posición.
Ahora bien, el sistema cubano
es perfectible, se ha demostrado en todos estos años, que los delegados de circunscripción,
los mas allegados a la base del pueblo, cuentan con poco poder para cambiar
realidades cotidianas que afectan a sus electores, en muchas ocasiones con la
repetición de este hecho se pierde el interés de los electores en esas
asambleas barriales por tener una participación activa, y además en ocasiones
se siente que solo se puede “hablar” sobre los problemas concretos, sin poder
levantar la cabeza del piso por donde se camina, y discutir cosas que afectan a
todos como país. Temas todos, para analizar y buscar nuevas soluciones.
En la discusión que se produjo alrededor de este
post en el blog mencionado, que invito a visitar, deje espontáneamente algunas
reflexiones que dejo a continuación:
No
voy a escribir sobre mi opinión sobre el sistema electoral cubano porque ya he
dejado en otras ocasiones mi parecer, se que la “teleaudiencia” se renueva y en
ese sentido veo muy útil que una y otras vez este blog escriba sobre las
ventajas indiscutible del sistema sobre todo cuando como se dice al principio
“la prensa libre” ya niega desde el vamos por estar instalado el sistema en
Cuba en verle algo novedoso o según sus cánones “democráticos” algo para
alabar.
Es
difícil resistirse a la persuasión con argumentos de Fidel, pero hay pasajes de
su intervención que no logro entender y que me parecen para analizar. ..
“…En
realidad, soy contrario a las elecciones directas de los jefes de Estado y a
las elecciones directas de los presidentes de los Poderes Populares, es una
convicción íntima; lo que necesitamos no es gente con mucho poder, con excesivo
poder; lo que necesitamos es gente con un poder moderado.
Si
en el partido al primer secretario lo elige el congreso, después prácticamente
responde nada más que ante el congreso, no responde ante el Comité Central.
Hay
ocasiones en que hay gente que le ha gustado la elección directa por el
congreso, le da más fuerza, le da más poder por encima de los demás. Si al
primer secretario lo elige el Comité Central y no el congreso directamente,
tenemos un primer secretario, o un secretario general, o como le llamen, con
menos poder que si lo elige el congreso. Tiene que rendir cuenta ante ese
organismo que lo ha elegido y que se puede reunir en 15 días o en un mes; de lo
contrario, hay que reunir un congreso realmente para cambiar, sustituir, o
exigirle cuenta a un secretario del partido.
Lo
mismo ocurre con la jefatura del Estado. Es mucho más democrática y más
práctica la elección por un organismo colegiado, por una asamblea, porque el
individuo que recibe en una elección el voto directo tiene un poder enorme, se
puede endiosar y sentirse por encima de todos los demás. Resulta investido de
ese poder en una elección después de la cual no tiene que rendirle cuenta a
nadie.
Yo
encuentro mucho más democrática, mucho más práctica, realmente, la elección por
una asamblea, como se elige en nuestro país la jefatura del Estado o del
Consejo de Estado; me parece más humilde y más democrática.”
Me
he preguntado siempre, ¿no es al revés?. De la manera que plantea Fidel, un
jefe de estado se cocina entre los cercanos que lo eligieron, se puede
equivocar, puede hasta firmar decretos en contra del pueblo, solo tiene que
rendir cuenta en apenas 15 días reuniendo a esos pocos que lo eligieron. No he
logrado que los argumentos de Fidel me convenzan, no hablo de multipartidismo,
los que me conocen saben mi posición al respecto, hablo que el pueblo en sus
asambleas barriales definan al jefe de Estado, hablo que para cambios
trascendentales que vayan a cambiar la idea filosófica que vive Cuba primero
tenga que consultar a la Asamblea Nacional y luego al pueblo, incluso que si no
lo hace como ya se planteo y creo que esta recogido así en la constitución, el
pueblo de Cuba tenga derecho a levantarse en Armas para restituir lo que está
en la constitución. ..Vuelvo, la generación histórica se ganó con creces su
lugar, pensemos en una Revolución por los tiempos de los tiempos ya democrática
pero siempre perfectible.
Y luego agregue lo
siguiente, como respuesta al hecho de que se me hacía ver que era muy claro lo
que Fidel expresaba:
…me
disculpo por no verlo tan claro como tú, pero debo aclararte sinceramente, que
Fidel en esa parte concreta, no me convenza no es nada del otro Mundo, uno es
un guajacón del Rio Pastrana, es decir nada, así que con que a los que tiene
que convencer lo haga, es suficiente para mí.
Ahora
bien, la generación histórica y su líder pusieron una vara muy alta, es decir
fueron gente que se organizo, asaltaron un cuartel, estuvieron preso, luego el
exilio, luego vinieron con 82 tipos en un barco, quedaron apenas 15, crearon
una guerrilla, triunfaron militarmente ante un ejército muy superior en hombres
y armamentos, tuvieron la inteligencia, de convocar a una huelga general en el
momento justo para que fuera el pueblo todo el que en definitiva triunfara, y
luego todo lo que también conocemos, 60 años peleando con esa espada de Damocles.
Esa historia le ha dado no solo una experiencia sino una autoridad moral, luego
venimos nosotros la generación que gracias a esa otra, fuimos gente,
estudiamos, fuimos buenos pioneros, fuimos a la escuela al campo, sembramos
tomate o recolectamos tabaco en 45 días, fuimos a la universidad, nos creamos
un conocimiento científico sobre el Mundo, militamos, íbamos a cuanta
movilización se presentaba, acompañábamos la construcción de la nueva sociedad,
cortamos caña, sembramos plátano microjet en movilizaciones de los nuevos
trabajos, hay quien fue a Angola otros a Etiopía, otros fueron médicos y han
dado su esfuerzo y solidaridad en otros países y los que decidieron ser cuadros
políticos, siguieron su carrera en ese sentido, primero en la base, luego en el
municipio luego en la nación, los mas destacados dirigieron los destinos de una
provincia. Meritorio todo esto, muy meritorio, pero la autoridad se diluye, ¿es
mejor esto?, no lo se, es posible que a partir de ahora habrá que darle más
importancia al Consejo de Estado como un todo, y no a una figura en particular,
pero de igual manera será una transición para un pueblo que no estuvo
acostumbrado a ello y aun así si fuera este el objetivo final, hay igual que
poner otro cerrojo y dejar que el Pueblo en sus asambleas barriales los elija.
Por otra parte no somos China, ni la URSS en su momento, lo verdaderamente
grandioso es que somos (a veces me incluyo, aunque no lo merezca) es que
hicimos y construimos algo distinto aqui al`laito de los yanquis con nuestras
particularidades, que a veces a lo largo de nuestra historia también
despreciamos para parecernos más a no sé quien (pero bueno ese es otro cantar).
No
hay método infalible, no hay nada perfecto,¿ los pueblos se equivocan como un
todo?, hay que ser consecuente con la verdad histórica y decir que también,
pero seria un mecanismo mas, ¿es que nuestro sistema no es democrático?, lo es
, este post lo demuestra una vez mas, pero siempre puede ser mas democrático,
me puedes decir que ahora nadie pide esto en Cuba, puede ser, si leemos con
detenimiento lo que dice Fidel, en su momento nadie pedía que los diputados a
la Asamblea Nacional fueran elegidos directamente por el pueblo, ni siquiera
nuestros representantes hicieron esa pregunta, y sin embargo la dirección del
país le dio una media vuelta de rosca a nuestra democracia de entonces. ¿Que
como hacerlo?, no tengo suficiente inteligencia para ello, pero estoy seguro
que la discusión colectiva la encontrara, ahora bien, hoy sabemos antes de
Marzo que Díaz Canel sera el próximo presidente del Consejo de Estado y por
tanto de la República de Cuba, ¿me va?, y si, pero ¿qué otras opciones tengo?,
y si alguien quiere que sea Ramiro Valdez, o Yaramis Armentero Medina, donde
puedo votar por ellos, como dejo constancia, ni siquiera a través de mi
representante en la Asamblea puedo expresar mi deseo. Alguien ya decidió por
mi, ¿esta bueno que esto sea asi?, si la mayoría está de acuerdo, yo lo estoy,
aunque siga en mi postura.
En
el pasado descubrimos a los Roques y a los Lages, por los órganos de seguridad,
pero también una parte de los órganos de seguridad en 1989 pusieron en peligro
la Revolución, nada es infalible, y las cosas alcanzadas que han costado
sangre, sudor y lagrimas aun pueblo hay que cuidarlas, nada esta de mas si es
para el bien de una nación. Ojala algún día se pueda hacer lo que pido
sinceramente.
Luego me he quedado
pensando, que no habiendo una autoridad moral significativa o al menos
comparable con la generación histórica que
se retira, la legitimidad política de origen votando directamente al Jefe
de Estado o inclusive mejor, al Consejo de Estado como un todo, que por
supuesto la tienen ya hoy con la manera indirecta de su elección, por la
esencia intrínseca del sistema que parte de un inicio con las Asambleas
Barriales, sería un plus muy importante para acercar esa cúpula nueva a la base y reeditar de alguna manera los inicios de
una Revolución que cumplirá al final del corriente año, su 60 Aniversario.
Cuba está en un momento
crucial de su historia, no solo porque está llegando a un aniversario donde
solo dos Revoluciones genuinas anteriores llegaron, La Rusa 73 años y la China
que este año cumpliría sus 69 años, sino también porque a partir de este 2018 una nueva generación prácticamente nacida con ella asumirá las riendas del país,
a partir de ahora la historia de los que estarán en el poder y de los que
caminan por los barrios cubanos serán iguales, su autoridad tendrá que ser
constantemente refrendada por su gestión y por su entrega total a resolver los
problemas concretos de la gente de a pie, la intolerancia a la ineficiencia y
al no logro de resultados será mayor que la que se tuvo para la generación histórica, que habría hecho un
cambio radical en la sociedad cubana, construyendo nuevos valores humanos y
nuevas relaciones productivas. Es por ello, que considero oportuno la elección directa
del Presidente de la República de Cuba y mejor aun de su Consejo de Estado, que
tienen a su cargo la dirección operativa, y si esto va aparejado con la instalación
de una Asamblea Nacional elegida como hasta ahora se hace, pero con miembros
que legislan durante un periodo más largo en el año, donde todos los decretos
del Consejo de Estado pasen por la discusión de esa Asamblea, estaremos en
presencia de un Sistema Democrático robustecido y con una mayor legitimidad política
de origen.
Todo es perfectible, el
sistema democrático cubano sin renunciar a su esencia, también, lo anterior
puede ser un camino posible, estoy profundamente persuadido de ello.