Viaje a la Luna

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Una memoria a mis antepasados, a mis vivencias...unos versos de futuro.

QUIEN NO SE OCUPA DE NACER SE OCUPA DE MORIR

viernes, 7 de junio de 2019


BOLIVIA FRENTE AL "NO HAY ALTERNATIVA"
(Por Alfredo Serrano Mancilla (*), PAGINA12)


Vuelve con toda su fuerza. La vieja receta del “no hay alternativa” cobra su máxima importancia en estos tiempos de alta intensidad en la disputa geopolítica y geoeconómica. La vieja tesis resurge como si fuera nueva, con gran ímpetu y con la intención de convencernos de que el único camino es el neoliberal. 

La fuerte restricción externa que acecha a Latinoamérica desde hace varios años ha puesto en tensión a la mayoría de los modelos económicos, con independencia del signo político que los gestione. Salvo en contadas excepciones, la mayoría de las economías no ha sabido conducir el nuevo ciclo a la baja del precio de los commodities. La caída de las divisas procedente de la venta de materias primas ha resultado, finalmente, ser el principal adversario electoral para muchos gobiernos de la región, que siguen buscando la fórmula para superar un frente externo tan adverso. 

La ecuación se hace cada vez más compleja. ¿Cómo contentar a todos los sectores de la economía en un marco de escasez de divisas? ¿Cómo sostener la política de derechos sociales en aquellos países que no están dispuestos a renunciar a ello, a pesar del frente externo desfavorable? ¿Cómo reactivar economías altamente extranjerizadas si no hay divisas? ¿Cómo cambiar el modelo productivo si hay una elevada dependencia de los insumos productivos importados? Son preguntas que no tienen respuestas sencillas. Y es en este contexto donde pretende imponerse el “no hay alternativa”. Es habitual que, ante la generalizada falta de previsión por la caída de divisas, aparezca el gran prestamista que está dispuesto a entregar dólares únicamente a cambio de la implementación de sus políticas económicas, las llamadas “pragmáticas”, las únicas posibles, esto es, todas las medidas económicas neoliberales que ya conocemos. 

Es así como juntan “el hambre con las ganas de comer”. Por un lado, ganan los que se beneficiaron del exceso de liquidez propiciado por la megaemisión monetaria realizada en el periodo 2008-2015 en Estados Unidos y Europa; y, por el otro lado, están los necesitados de divisas. El caso argentino, seguramente, es el más emblemático por la velocidad de implementación del programa made in FMI. Algo similar se está haciendo también en Ecuador. Te presto dólares a cambio de no tomar otra salida que no sea la neoliberal. 

De esta forma, la restauración conservadora procura ganar el pulso geopolítico regional con el “no hay alternativa” como bandera. Y, sin embargo, les salió un incómodo caso que contradice todo su relato. Se les olvida, adrede, lo que pasa en Bolivia, donde sí hubo alternativa, y aún la hay. De hecho, muy exitosa. Y, además, con el aval y satisfacción de la mayoría. En la encuesta realizada por CELAG en marzo de este año, 6 de cada 10 personas creen que ha habido una mejora de las condiciones de vida gracias al actual modelo económico. 

En la fórmula económica boliviana se parte de un principio básico: no sólo es posible conciliar la justicia social con la eficacia económica, sino que, además, crean sinergia entre sí. La demanda interna es la base sólida del crecimiento económico que permite, asimismo, tener capacidad de amortiguar cualquier shock externo adverso. Las políticas redistributivas en materia de derechos sociales en Bolivia (Bono Juancito Pinto, Bono Juana Azurduy de Padilla, Renta Dignidad) fueron fundamentales para constituir una robusta demanda interna sostenida en el tiempo. Esas políticas sociales se lograron financiar con recursos que antes se iban del país. Gracias a la nacionalización se evitó esa fuga y, además, se demostró que lo estatal, si se hacen bien las cosas, es capaz de presentar un funcionamiento eficaz y eficiente en clave económica. La mayoría de las empresas públicas nacionalizadas en sectores estratégicos (YPFB, Entel o Boa) revalorizaron su patrimonio y tienen un flujo de caja con un saldo muy positivo, que permite mayor inversión pública productiva, así como garantizar derechos sociales. En reciente estudio de CELAG se demostró que, si no se hubiera producido nacionalización, Bolivia hubiera dejado de generar riqueza económica por un valor de 74.000 millones de dólares (que, por ejemplo, representa 2 veces el PIB del año 2017). 

Bolivia ha demostrado que sí se puede tener una inserción soberana e inteligente contra la restricción externa. Que se puede desdolarizar la economía y tener, al mismo tiempo, un sistema financiero sólido. En la actualidad, el sistema financiero se ha bolivianizado; por ejemplo, más del 95 por ciento de los depósitos se hacen en moneda nacional. Que se puede tener estable el nivel de precios al mismo tiempo que los ingresos y el consumo crece. Que se pueden reducir la desigualdad y la pobreza mientras la economía sigue creciendo a tasas récord en Latinoamérica. Que se puede mejorar notablemente el bienestar social en condiciones macroeconómicas sólidas.

Que se puede y se debe. Es así como Bolivia le viene la ganando la partida al “no hay alternativa”, demostrando que, con una forma diferente de hacer política económica, soberana y ordenada, con justicia y eficiencia, se ven los buenos resultados, que se visualizan tanto en las cifras como en cualquier aspecto de la vida cotidiana del pueblo boliviano. 

(*) Director Celag, Doctor en Economía.



Avancemos en la conformación de listas unitarias de la izquierda
(Por Christian Castillo, "LA IZQUIERDA DIARIO")

A pocos días del cierre de listas, el Frente de Izquierda sigue impulsando una política activa para lograr una mayor unidad de la izquierda anticapitalista.

Este jueves, como saben los lectores de La Izquierda Diario, el Frente de Izquierda y de los Trabajadores ha mantenido una reunión con los compañeros del MST.

En la misma, desde el FIT hicimos una propuesta de unidad, basada en la necesidad de unir a toda la izquierda anticapitalista en listas comunes, para potenciar en estas elecciones una voz de independencia de clase frente a la catástrofe a la que nos conducen el FMI y todos los partidos tradicionales.

Ya todos los candidatos, tanto del macrismo como del peronismo, han dicho que en caso de ganar las elecciones seguirán adelante con los acuerdos con el organismo internacional, que solo pueden llevar a más pobreza, desocupación y ataques a las condiciones de vida de los sectores populares. Toda promesa de renegociación no es más que un engaño: el FMI exigirá a cambio más ajustes y reformas antipopulares.

A esa perspectiva, desde la izquierda le oponemos un programa para que la crisis la paguen los grandes empresarios, banqueros y terratenientes. Para nosotros, que estamos siempre del mismo lado, la prioridad siempre son los intereses de las grandes mayorías.

En este camino, desde el FIT hemos resuelto integrar en nuestras listas a compañeros y compañeras de Poder Popular, cuya referente principal es María del Carmen Verdú, y del PSTU.

También hemos mantenido reuniones con Autodeterminación y Libertad de Luis Zamora, que tienen personería en CABA, aunque hasta el momento los compañeros han rechazado nuestra propuesta de unidad. Creemos que es un error de su parte anteponer los debates reales que tenemos entre nosotros antes que la necesaria unidad de los que somos anticapitalistas y peleamos por otra salida a la crisis. Es por eso que seguiremos insistiendo con esta propuesta de unidad y llamamos a los compañeros y compañeras a reflexionar, ya que una actitud sectaria es más peligrosa que nunca en este momento y funcional tanto al macrismo como a las variantes peronistas.

Asimismo, nuestro planteo de unidad convoca a los compañeros y compañeras del Nuevo Mas, proponiendo también acordar con ellos un programa de salida a la crisis y su integración a listas comunes de la izquierda.

Finalmente, desde el PTS consideramos también que es necesario hacer extensivo este planteo no solo a las organizaciones, sino también a personalidades y compañeros/ de la izquierda que no harían más que fortalecer nuestro planteo frente a la crisis, como todos aquellos dirigentes obreros, estudiantiles y del movimiento de mujeres que acuerden con el programa del FIT.

Mayores avances en la unidad sin duda contribuirán no solo a plantear con más fuerza una voz anticapitalista frente a la crisis, sino también a conquistar nuevas bancas legislativas (hoy el FIT tiene más de 40) para potenciar las luchas de los trabajadores, las mujeres y la juventud de las que participan miles de militantes del FIT junto a luchadores en todo el país.







LA ODA QUE SALGA

Abusaré de mi memoria,
que ha hecho infinito tu goce
y el mío,
declamaré en una esquina cualquiera
(ya he usado en demasía Armas y C)
la voluptuosidad de tus espasmos
con apenas un roce de mis labios,
tomaré la lira
 y no siendo un ángel,
 convocaré a otros,
 mis compadres,
 menos al que cayó,
 (mejor lejos en estos menesteres)
 para evocar las siempre ganas
 de cobijarme en ese paraíso
 que tus piernas esconde
 con álamos al viento,
 No doy garantía,
 de que la Oda que salga,
 abusando de mi memoria,
 sea un digno reflejo
 de la ambrosía
 que es tu estantería